Alejandro Santillán: “En nuestra querida Olavarría se han perdido, se están perdiendo y se van a perder muchos puestos de trabajo”
El dirigente de AOMA subrayó que en 2024 se produjeron unos 200 despidos en el rubro minero local, “es una cifra muy dolorosa” definió. El contexto complejo para la negociación sindical.
En el marco del cierre de la negociación paritaria que logró AOMA para la rama cal y piedra -con una medida de fuerza declarada hace un mes-, el secretario general del sindicato en Olavarría, Alejandro Santillán, brindó una entrevista al programa Levantate por Radio Sapiens (FM 102.7) donde planteó un oscuro panorama para el sector minero y también para las discusiones salariales.
“Estamos en un momento demasiado complejo. Entiendo la situación de los trabajadores, uno es trabajador y está todo el tiempo en contacto. Estamos en un contexto donde nuestra industria lamentablemente se va a seguir achicando. Los acuerdos que estamos haciendo, también a nivel local y con algunas canteras, son para que no echen tantos trabajadores. Tenemos trabajadores suspendidos en sus casas cobrando un porcentaje del sueldo. Cuando la parte empresarial termina sacando créditos para poder pagar los sueldos, creo que es un final anunciado. Lo peor que me había tocado fue a mis comienzos de la carrera sindical, una empresa -CEFAS- de la noche a la mañana cerró sus puertas y quedaron más de 50 trabajadores en la calle. Lamentablemente, creo que vamos a tener este año muchos CEFAS en Olavarría” describió.
Informó que a lo largo del año 2024 se produjeron unos 200 despidos en el sector minero local y apuntó a que la caída de la actividad se verifica en casi todos los rubros industriales.
En cuanto al desarrollo de las paritarias durante el año, Santillán aseguró que “se hacer muy difícil poder discutir” con las cámaras empresariales los porcentajes de suba. Advirtió el contraste entre “cuando uno se acerca a un surtidor de una estación de servicio, va al supermercado, paga los impuestos, paga los servicios, los medicamentos, han tenido aumentos totalmente desmedidos” y en paralelo el INDEC muestra “inflaciones de 2,4 o 2,7 por mes”. A ello añadió que “el gobierno se está haciendo muy activo para que las organizaciones sindicales no puedan llegar a acuerdos que superen esos porcentajes”.
Consideró que “es muy difícil que nuestros compañeros lo entiendan” al dar cuenta del descontento que se percibe por las subas salariales. Y subrayó que “con las diferentes cámaras, a veces en vez de terminar acordando salarios, estás negociando que las empresas echen lo menos posible y que no dejen a los trabajadores en la calle”.
“Para mí no hay una crisis económica. Esto es una crisis política, son decisiones que se toman” sostuvo Santillán al apuntar a que el parate total de la obra pública es el origen de los problemas para el rubro minero local. “Un Gobierno con la intención de que se llegue al déficit cero, de que se achiquen los gastos o que no haya inversiones del Estado repercute muchísimo y principalmente en nuestra actividad. Más del 70 por ciento de lo que producíamos dentro de las caleras, cementeras y canteras iba a la obra pública” dijo.
El dirigente gremial reconoció que “entendemos que de parte de la sociedad hay de alguna manera un descontento con la parte sindical. Pero no son momentos de los mejores. Hoy el sindicalismo no tiene la fuerza. Cuando las empresas, que son las que realmente tienen poder, hacen cosas que no corresponden uno no puede inclinar la balanza. Hoy no se puede porque cualquier medida de fuerza que pueda hacer una organización sindical obviamente que favorece la parte empresarial. Ahora, lo que no nos conviene a nosotros con esta situación por decisiones políticas del Gobierno, te puedo asegurar que por los pasillos y en off las empresas tampoco están muy conformes”.
Las cementeras
Tras exponer el detalle mensual del acuerdo cerrado, añadió que “desde el año 2012 aproximadamente, los compañeros del cemento teníamos un reconocimiento, un bono anual que era una cifra realmente importante. Y hoy nos encontramos con que las cámaras de ninguna manera han aceptado o han querido reconocer el esfuerzo de los trabajadores”.
Mencionó a las dos grandes empresas productoras de cemento con plantas en Olavarría, para definir que “a todas luces estas empresas han sorteado las crisis que ha tenido nuestro bendito país y son empresas que tienen estructuras que pueden reconocer. Pero nos hemos encontrado con una postura demasiado dura”.
Para contrastar, informó que “hay empresas, una cantera que son 20 trabajadores, donde los empresarios con todas las dificultades que tienen han tenido la deferencia de reconocer a sus trabajadores y les han dado un bono. Y estas empresas que realmente, económicamente siempre se han podido sostener por la infraestructura que tienen, te cierran la puerta de la negociación”.
Más adelante, contó que “en Cementos Avellaneda, en la parte de la cantera se ha reducido, han desvinculado muchos trabajadores. Algunos con algún acuerdo, pero son trabajadores que se quedan sin trabajo. Se han desvinculado más de 50 puestos en cantera, en la parte de destape. Con Loma Negra, no en Olavarría, pero sí ha habido algún tipo de desvinculación de trabajadores”.
La proyección para la actividad es pesimista basada en “determinaciones de parte del Gobierno a semanas de determinar el año”. Santillán expuso que para 2025 “la parte empresarial, tanto de cemento como de cal y piedra, estaban siendo un poco optimistas porque estamos en un año electoral y se entendía que, de alguna manera, el gobierno iba a inyectar algo de obra pública”. Indicó que estaba previsto el desarrollo de obras desde la Dirección Nacional de Vialidad, lo que significaba “un 30 o 40% de lo que veníamos haciendo antes”. Pero “algún funcionario -y entendemos que fue (Federico) Sturzenegger- tomó la determinación de retirar ese dinero que estaba en Vialidad”. La novedad, sostuvo, tuvo impacto negativo en todo el rubro de la construcción.
Despidos, un problema presente y futuro
“En Olavarría se han perdido más de 200 puestos de trabajadores mineros. Es una cifra muy dolorosa” remarcó sobre lo sucedido el año pasado.
“Estamos en un contexto donde han desvinculado muchísimos trabajadores. En nuestra área hay canteras que han sacado turnos por completo o empresas grandes de la parte de cal y piedra donde se han venido reduciendo. Todos los meses estamos teniendo muchísimos trabajadores que se quedan en la calle. Sí es cierto que los trabajadores que terminan desvinculados -y mirá lo que estoy planteando, el punto al que hemos llegado- se van con su indemnización. Son trabajadores que quedan netamente en la calle con un sistema económico donde no es que a la construcción, a la minería, le está yendo mal pero a otro rubro le va bien” manifestó el dirigente de AOMA.
Enumeró empresas en distintos puntos de la provincia que han cerrado sus puertas en las últimas semanas para plantear que “son determinaciones que ha tomado el gobierno donde de alguna manera lo poco que teníamos industrializado se está parando. Lo podemos ver en los medios nacionales, hoy conviene comprar cosas de afuera”. Aclaró que no se espera que se importe cemento, pero “al no haber obra pública, la parte privada no invierte. Los empresarios van a invertir en lugares donde realmente les sea redituable”.
Con ello retomó el tema: “en nuestra querida Olavarría se han perdido, se están perdiendo y se van a perder muchos puestos de trabajo”.
Alejandro Santillán también se refirió a otras implicancias de esta caída de puestos laborales. “Hay una cantera que hace menos de un mes iba desvincular a los dos trabajadores. Eran mecánicos o volquetistas. Como no hay trabajo, la empresa empezó a ubicarlos en diferentes lugares, cortar el pasto, pintar, vigilancia. En la noche que se quedaban a cuidar la cantera para que no sufran un robo. A mí me molesta que desvinculen a trabajadores y que las empresas contraten a la Policía para cuidarlas. En las localidades, que la verdad que no abundan los patrulleros ni los efectivos policiales, en vez de estar en la calle, cuidar a los vecinos, están cuidando a empresas privadas”.
Sobre el cierre de la entrevista radial resumió su postura: “es muy complicado. Estamos viendo una situación donde para un sector de la sociedad se entiende que es el camino correcto. Dentro de ese camino correcto que está tomando el Gobierno tenemos como consecuencia muchos trabajadores desvinculados. La realidad es que basta con recorrer la parte industrial de Olavarría y se van a encontrar con nuestro motor productivo todo parado”.