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Finalmente, se postergó la mesa de trabajo para negociar el Presupuesto y la Ley Impositiva

La gestión Kicillof finalmente no avaló la propuesta de que se retomen las negociaciones, y la postergación por ahora no tiene fecha concreta.


El Gobierno de Axel Kicillof decidió postergar el diálogo con los legisladores bonaerenses para destrabar los proyectos de Presupuesto y Ley Impositiva, dejando en suspenso las conversaciones que se esperaban para este martes.

Tras el fracaso de la sesión a fin de año y la prórroga oficial de ambas iniciativas para 2025, se preveía que funcionarios de la administración provincial se reunirían con legisladores tanto oficialistas como opositores, pero fuentes oficiales confirmaron que no habrá cónclave por el momento.

El primer encuentro, que debía realizarse con la presencia del ministro de Infraestructura, Gabriel Katopodis, conocido por su habilidad en la negociación política, quedó sin fecha definida. Aunque se habían planificado dos tandas de reuniones con los jefes de bloque de la UCR y el PRO el martes, y con el resto de la oposición al día siguiente, no se formalizó ninguna convocatoria.

El Ejecutivo bonaerense busca negociar las leyes junto con la cláusula de endeudamiento, que requiere una mayoría de dos tercios en la Legislatura. Este punto, junto con el fondo para el financiamiento de los municipios, fue el motivo del colapso de la sesión anterior. La oposición, liderada por UCR y PRO, propuso un reparto de $470 mil millones entre los municipios, mientras que el Gobierno ofreció hasta $160 mil millones. Esta discrepancia llevó a los opositores a rechazar el endeudamiento de 1,2 billones de pesos solicitado por el Ejecutivo.

Kicillof advirtió que sin esos recursos prefería continuar negociando, ya que consideraba que se le imponían obligaciones presupuestarias sin el financiamiento necesario. En este marco, la sesión quedó suspendida.

Diego Garciarena, presidente del bloque Acuerdo Cívico UCR + GEN, expresó en la red social X que los legisladores opositores estaban dispuestos a iniciar el diálogo esencial con el Ejecutivo para dotar al gobernador de las herramientas necesarias. Sin embargo, reconoció que no había una convocatoria oficial por parte de la Gobernación para empezar el debate, reflejando la incertidumbre sobre el futuro de estas negociaciones.