Tras el hecho de violencia en un Jardín Maternal Municipal, la coordinadora desmintió al STMO

Daniela De Líbano aclaró que nunca tuvo comunicación telefónica con José Stuppia, y relató cómo fueron los hechos días atrás. “Nadie discute que el sueldo de varias de mis compañeras es bajo, eso no está en discusión, pero se priorizó abrir un jardín para que los nenes puedan volver a sus días cotidianos”.

Luego de conocerse presuntos hechos de violencia en un Jardín Maternal Municipal por parte del Sindicato de Trabajadores Municipales por haber levantado el estado de asamblea permanente y volver a recibir a los niños y niñas que asisten a la institución, la coordinadora del maternal “Principito”, Daniela De Líbano, desmintió diversas acusaciones gremiales y aclaró cómo fueron los hechos.

Lo hizo en diálogo con Radio Olavarría, al ser consultada por los hechos que se hicieron públicos desde el Ejecutivo con un repudio por lo sucedido. Horas después, el propio José Stuppia desmintió que haya sucedido una situación de esa índole.

De Líbano señaló que tras la profundización de las medidas gremiales, el Jardín estuvo sin recibir a niños y niñas durante 4 días. El lunes 7, decidieron en asamblea retomar la atención, y por esa medida integrantes del gremio estuvieron en el lugar para pedir explicaciones por la decisión: una madre observó presencia de integrantes del sindicato y se mostró preocupada,

El martes, De Líbano encontró a José Stuppia sentado en el SUM con tres de las trabajadoras y ella misma tuvo un intercambio con el gremialista: “Se generaron situaciones que no estaban buenas para el personal”. De hecho, allí mismo le aclaró que “había tenido una denuncia, que por favor lo tengan en cuenta”. El intercambio subió de tono y ella decidió terminarlo, afirmó.

Tras irse a las salas del maternal, Stuppia ingresa e “interrumpe en las otras dos salas donde había menores, estaban los niños” precisó la docente.

En la sala de deambuladores, Stuppia usó un tono más elevado, al tiempo que otra madre ingresaba al jardín maternal y llegó a observar la escena. Esa madre fue la que expresó que no tenía que pasar que esas personas estén en el jardín y que, si volvía a suceder, había que avisarle para que retire a su hijo, señaló De Líbano. “Es una queja de una mamá que es entendible y fue tomada en cuenta” agregó.

En este punto, también desmintió haber forzado a que el equipo de trabajo vuelva a trabajar y que fue una decisión en conjunto: “Nunca habíamos tenido una asamblea que dure tanto tiempo” dijo y aclaró: “Yo no le bajo lineamientos a nadie”.

“Mis compañeras son totalmente inteligentes y capaces de poder decidir en libertad. Tanto la decisión de tomar la asamblea como de levantarla, siempre se hizo en conjunto, nunca porque yo dije ‘hacemos o dejamos de hacer’” reiteró la coordinadora.

Con respecto al tema de fondo, aclaró que “nadie discute que el sueldo de varias de mis compañeras es bajo, eso no está en discusión, pero se priorizó abrir un jardín para que los nenes puedan volver a sus días cotidianos” justificó.

En otro punto del diálogo, De Líbano desmiente explícitamente a Stuppia cuando afirma “yo nunca lo llamé llorando” como dice en la nota publicada por el mismo portal de Radio Olavarría que entrevistó a Stuppia. Incluso, aclaró que “siempre que han pasado las compañeras del sindicato fue de manera cordial”, según ella ve y le han contado sus compañeras. Por eso, manifestó no entender “por qué Stuppia expresó que lo llamé”.

Descartó cualquier tipo de presión por parte de las autoridades municipales como Malena Pianciola. “No fuimos los primeros en endurerecer la asamblea, sí fuimos los primeros en levantarla” aclaró y señaló que, tras el hecho, hubo una importante reunión de padres para aclarar la situación, catalogada como “necesaria”.

“Tal vez José no comprende cómo es el manejo de una institución, por eso también manifiesta ciertas cuestiones de lo que fue la reunión de los padres, que exigen porque salió una nota y porque querían una explicación de parte mía y de parte del Ejecutivo” puntualizó.

La coordinadora del Principito reiteró: “Acá lo que se está cuidando es pura y exclusivamente el estado emocional de los niños y niñas que concurren al maternal, que tienen entre 45 días y 3 años”.

“Tenemos 38 niños y niñas en dos turnos. Yo soy la responsable de esta institución y mientras yo esté, mi prioridad es el estado emocional de los niños que concurren al jardín” concluyó De Líbano.