“Me voy feliz por haber estado al frente de una institución con tanto prestigio”
Después de más de una década al frente de la Asociación de Básquet de Olavarría, el próximo jueves se realizará la Asamblea Anual Ordinaria del ente regulador del básquet local y Héctor Burghini dejará su cargo.
Fue en febrero de 2012 cuando ingresó en el cargo máximo al ente que rige los destinos del básquetbol de Olavarría y fue reelecto en cuatro períodos para conformar una de las mejores etapas del deporte de los cestos olavarriense.
Con mandato cumplido por parte de Héctor Burghini que deja la casa madre del básquetbol en marcha competitivamente con las programaciones de Inferiores (Femenino y Masculino), Primera y Maxibásquet, con superávit económico, sin deudas y encaminada al segundo semestre.
Así se refirió el actual Presidente de la ABO a la entrevista de despedida.
¿Qué saldo te dejaron las cinco Presidencias de la ABO?
“Como saldo de los cinco procesos quedé muy conforme, muy contento por todo lo que trabajamos por el básquet de Olavarría. Más allá del desgaste que produce estoy muy feliz por haber estado al frente de una institución con tanto prestigio y tanta historia como la Asociación de Básquet de Olavarría”.
¿Te vas conforme con tu gestión?
“Me voy más que conforme, me voy recontraconforme por el grupo de trabajo que se conformó, por haber estado a la altura de las circunstancias, por todo lo que se pudo llevar adelante, por haber posicionado a Olavarría en un nivel importante, haber hecho torneos y ser competitivos en ellos y haber presentado y realizado proyectos innovadores; lo que me deja muy feliz por haberlo realizado en estos años”.
Bajo tu mandato la ABO llegó a posicionarse en lo más alto en el ámbito local y bonaerense, ¿Cuál debe ser el perfil de tu sucesor?
“No soy quien para definir el perfil del sucesor. Mi idea es tener claros los objetivos y trabajar para los chicos, el básquetbol y las instituciones. Los intereses personales, en un dirigente no pueden existir los intereses personales, ni políticos. Hay que abrir puertas para que cada vez haya más chicos jugando al básquet, mejorar los espacios, las condiciones y siempre estar dispuesto a trabajar por los demás. Todo esto me parece más importante que el perfil del dirigente que venga y de cualquiera”.
Fueron diez años a full en la Asociación, ¿Qué vas a hacer el 22 de abril?
“Va a ser un día cargado de nostalgia, un día más de trabajo y nada. Ahora voy a aprovechar el tiempo libre y estar internamente tranquilo porque sé que no puedo dar más de todo lo que dí y ya no tengo energía para seguir adelante”.
