En el Ministerio de Trabajo ya cuentan más de 1.000 despidos en Olavarría
Lo confirmó el delegado, Lucas Miriuka. Destacó que en el sector minero cayeron más de 300 puestos. Los trámites para el Fondo de Desempleo y el Monotributo Social, en ascenso. “No se están creando nuevas empresas” dijo.
Tras el cierre de la empresa FABI con la salida del país del grupo CMPC que significó 100 despidos y el cierre de una línea de producción en Cerro Negro que envió 96 telegramas de despidos, en el Ministerio de Trabajo de Olavarría cuentan en más de 1.000 los puestos laborales caídos desde el inicio de la gestión de Javier Milei.
El delegado, Lucas Miriuka, habló sobre el tema en el programa Levantate por Radio Sapiens (FM 102.7), quien explicó que la estadística local se reporta semanalmente al ministro bonaerense Walter Correa. “El conteo que llevamos supera los 1.000 despidos en las últimas dos semanas. A finales del año pasado estábamos lejos de ese número, pero en los últimos 20 o 25 días subió muchísimo, lamentablemente” dijo.
La labor de la cartera de Trabajo busca anticiparse y evitar despidos. Pero en los dos últimos casos de Olavarría esas instancias no fueron posibles. El funcionario provincial apuntó a que “cuando hay cierre de una línea de producción, como en Cerro Negro, o directamente el cierre de una fábrica, la intervención ya no es para que no haya ningún despido sino para ver cómo podemos hacer para que la empresa cambie la medida”.
En ese punto, explicó que “en el último año tuvimos algunos 223 bis que está previsto en la Ley de Contrato de Trabajo. Es un mecanismo en el cual la empresa abona un porcentaje menor de la remuneración, el trabajador concurre menos días a trabajar, pero no se produce un despido”. Miriuka explicó que con ese mecanismo se busca mantener los puestos de trabajo ya que tiene una duración predeterminada en la cual, habitualmente, las empresas logran revertir la adversidad. No obstante, no se dio en el caso de Cerro Negro. “Cerro Negro ya venía de un 223 bis y de dar vacaciones a los trabajadores. Estuvimos reunidos antes de que se produjeran los despidos, manifestaron que lo habían analizado y no les había dado resultado tampoco. Entonces se produjeron tantos despidos” señaló.
Miriuka informó que también mantuvo reunión con los directivos de la empresa de Hinojo. “En el caso de Fabi, reunido con los industriales de Chile me manifestaron que no era viable la operación en Argentina. Tomaron la decisión directamente de cerrar la fábrica y llevarse la maquinaria” remarcó.
La mayoría de estos 1.000 despidos se dieron “por goteo” aunque también hubo números impactantes, como en los casos de Fabi y Cerro Negro. Miriuka señaló que “a principios del año pasado fue muy grande la cantidad de despedidos en construcción” para mencionar lo sucedido a partir de la suspensión de la obra pública desde el Gobierno Nacional: entre 120 y 140 trabajadores afectados de la empresa Paolini Hnos que tenía a su cargo la construcción de un puente en el acceso a Sierras Bayas y los contratados para la ampliación de la Facultad de Ciencias de la Salud.
Minería, menos trabajadores y más riesgo de accidentes
“En minería ya llevamos arriba de los 300 despidos desde 2024 a ahora” subrayó el titular de la Delegación Olavarría del Ministerio de Trabajo. Remarcó que muchas empresas de este sector se adhieren a esa reducción de los días de trabajo y de sueldos para evitar despidos. “AOMA está permanentemente con acuerdos de 223 bis o en la cuerda floja sosteniendo que no haya cierres de empresas. Pero esto tiene un límite, no creo que podamos seguir sosteniendo esto mucho tiempo más” adelantó.
Ante la consulta, Miriuka respondió que son “muchas” las empresas que se adhieren al “acuerdo de 223 bis” y “sobre todo en el ámbito minero”.
La mayoría de los despidos en el sector minero se dan “por goteo”, no en números impactantes como las empresas ya mencionadas. “A veces uno se entera porque lo cuentan los mismos trabajadores, pero no vienen al Ministerio. Son despidos que no son contradictorios, la empresa se sienta con el trabajador, le comenta que le ofrece un retiro voluntario, un mutuo acuerdo, en base al 241 del Tratado de Trabajo, y se van” dijo para referir que el número total de nuevos desempleados es mayor al registro que lleva el Ministerio.
En ese marco, informó que con los despidos también aumenta el riesgo de accidentes laborales. A modo de ejemplo citó que “estaba charlando con un trabajador y me sorprendió cuando me dijo que una cantera que hasta hace no mucho tiempo tenía 60 trabajadores, ahora hay 20. Este trabajador me había venido a ver por un tema de un accidente laboral y me contaba que él estaba haciendo la tarea que antes hacían tres”.
Desempleo y Monotributo Social
El Ministerio de Trabajo tiene injerencia parcial en el trámite del Fondo de Desempleo, ya que se solicita en la Anses. Sin embargo, Miriuka también destacó que aumentó el número de personas que lo solicitan.
“Nosotros el Fondo de Desempleo lo hacemos en el Ministerio de Trabajo solamente ante situaciones contradictoras” aclaró para informar que “antes manejábamos 5 o 6 por mes. Ahora a veces hacemos 10 por semana, es una cifra altísima. Son situaciones que no estábamos acostumbrados a hacer en nuestra delegación” dijo.
Más adelante comentó que “trabajamos la Ley ALAS (Ley Provincial de Actividades Laborales de Autoempleo y Subsistencia) que otorga el Monotributo Social. Es para aquellos microemprendimientos en la cual el trabajador no paga el impuesto a los Ingresos Brutos. Eso también creció muchísimo. Son trabajadores que han quedado desvinculados, que inician algún tipo de actividad y nosotros, de alguna manera, estamos dando una mano. Eso también es importante y es otro dato que estamos viendo que está aumentando”.
En ese sentido, Miriuka fue consultado por posibilidad de reinserción laboral de los trabajadores despedidos. En la entrevista radial expresó que “no me parece factible en este momento que estamos atravesando que el trabajador consiga un puesto de trabajo, por lo menos a corto o mediano plazo. Yo veo que las empresas están cerrando. No se están creando nuevas empresas”.
El delegado provincial interpretó que para Olavarría, el problema clave es el parate de la obra pública nacional. “Cuando había crisis grandes en Argentina la obra pública se mantenía. Al moverse la industria minera, la industria cementera, movía al resto de las industrias en Olavarría. La crisis de desempleo y cierre de empresas no se veía. Entonces, teníamos un índice de desempleo muy bajo. La pésima política nacional en lo que respecta a la obra pública lo hizo caer” expresó.