“La educación pública es defendida por los argentinos en todo el país, incluso donde ganó Milei”

El politólogo olavarriense Andrés Malamud analizó las multitudinarias e históricas movilizaciones en defensa de la universidad pública. Dijo que en Olavarría “ciudad hiper fría marcharon de a miles” y que Milei “no ve un valor en lo público”.

A horas de la histórica movilización en defensa de la universidad pública en Olavarría y decenas de ciudades de todo el país, el politólogo olavarriense Andrés Malamud analizó lo sucedido y señaló que Milei “encima se empieza a comprar problemas por los que la gente no lo votó”.

Lo hizo en diálogo con María O’Donnell, en su programa radial “De acá en más” que se emite por Urbana Play. Desde Portugal, Malamud bromeó con su pasado en la UBA y dijo que “hay mucha gente que ahora que sabe que estudiamos en la UBA va a querer cerrar la universidad, tendremos que tener cuidado con lo que decimos (risas)”.

Ya metido de lleno en el análisis, destacó que lo que pasó en Ciudad de Buenos Aires “fue lo menos relevante de lo que pasó ayer. Es mucho más importante lo que no se vio en los medios porteños. Todas las plazas del país se llenaron. Rosario, Santa Fe, Córdoba, Santiago, Ushuaia, Olavarría que es una ciudad hiper fría y marcharon de a miles” destacó de nuestra ciudad, de donde es oriundo.

Dijo que, si bien no fue significativo, lo sucedido en Capital Federal “es una de las marchas más significativas desde la multipartidaria de 1982. Es que los porteños no son muy mileístas. Milei salió tercero en Capital. Pero arrasó en 16 provincias del interior. Su electorado es el que está dando una luz amarilla. No es una luz roja, pero tampoco una luz verde”.

De ello, dijo que “es una señal en la que hay características centrales de la institucionalidad y de la identidad cultural argentina que hay que tratar con cuidado. Lo que hagan los opositores es irrelevante. El palco vergonzoso de ayer no le interesa a nadie, es una cosa de porteño”.

“Lo que interesa es que los votantes de Milei están mandando un mensaje y es ‘Cuidado, que no se te vaya la mano’”.

Agregó en su tesis que “lo que ocurrió en la Ciudad de Buenos Aires fue tapa de los diarios, pero esconde el fenómeno real: la educación pública es defendida por los argentinos en todo el territorio nacional, incluso donde ganó Milei”.

Incluso, ejemplificó con lo sucedido en Córdoba y Mendoza: “la universidad pública argentina antes de la Argentina es la de Córdoba, precede a la creación del país. La segunda es la de Buenos Aires que se crea 10 años después de la Revolución de Mayo. Mirá si los cordobeses no tienen razones para estar orgullosos de la educación pública. Además, entre otras cosas, hicieron la reforma universitaria de 1918. Y votaron a Milei en más de un 70%. Por eso destaco la marcha en Córdoba, Río Cuarto y ciudades argentinas donde hay universidad”.

Metido de lleno en el ser político de Milei, “cree que el Estado no debe financiar nada, que todo tiene que ser el mercado. Es honesto, es auténtico”. Y criticó a sus seguidores, que “son menos honestos y auténticos. Hoy están hablando de que no es la gratuidad, es el ingreso irrestricto, son las auditorías. Están empezando a buscarle el pelo a la leche y entrarle por el costadito por el tema. Cuando Milei fue claro. Dijo ‘adoctrinamiento y lavado de cerebro’. Entra directo a discutir con las universidades, no por el margen. Él no alega solo corrupción, dice que vacían el cerebro de las jóvenes generaciones, que construyen argentinos corruptos. Son reproductores de casta”.

Sobre Mendoza, dijo que “tiene una gran universidad, tiene las principales instituciones científicos de renombre internacional. ¿Cómo no van a defender eso?”

“Milei es consecuencia de la catástrofe económica que lo generaron los gobiernos que lo precedieron. Y también es verdad que Argentina sigue teniendo cosas buenas, y la educación pública sigue estando por encima de todo. Aún con sus problemas, que no es para negar. Por arreglar un problema no tenés que producir uno mayor. Y lo que hacés es terminar con la educación pública porque tiene problemas es terminar peor de lo que empezaste”.

El presidente, para Malamud, “no ve un valor en lo público. No lo estamos criticando, lo estamos describiendo por lo que dice. Para él el mercado es el principal asignador de recursos y valores. El Estado, por definición, es una organización criminal. Todo lo que el Estado financia, está mal financiado. Él aceptaría Seguridad, Defensa y Justicia, porque es un minarquista. Es un anarco capitalista que se quedó corto”.

Lo interesante de estas marchas nacionales, en el análisis, es “que vienen después de una cadena nacional donde Milei se quedó sin forma y sustancia. Dio una noticia que todos sabían: superávit financiero en el primer trimestre. Él lo avisó en Llao Llao. Difundió públicamente tres días antes lo que iba a decir en la cadena. No están llegando buenas noticias de la gobernancia económica. Y encima se empieza a comprar problemas por los que la gente no lo votó, porque hubo una mayoría para que arregle la economía, no para que destruya la educación”.

Finalmente, dijo que lo sucedido este último martes dejó en claro que “no parece haber apoyo en la población argentina para la posición que sostiene, que de la educación se encargue el mercado”.