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El Club Santa Luisa cumple 101 años

Este martes es el aniversario y el sábado se hará una cena de festejo. El presidente, Walter Tolosa, contó las obras realizadas para mejorar la sede y los proyectos que quieren concretar: abrir todos los días y colocar el piso en el salón. “Viví la época en que el club estaba para todo el mundo y sigo pensando que es para todo el mundo” dijo.


Este martes, el Fútbol Club Santa Luisa cumple 101 años. La celebración se hará el fin de semana próximo con una gran cena y baile con más de 400 asistentes. La institución sueña con un futuro con mucha actividad y, para ello, las autoridades iniciaron hace ya dos años la reparación y renovación de las instalaciones.

Quienes hoy son dirigentes vivieron un pasado “de oro” del club, que decayó de la mano de los cambios en la localidad: hay muchos menos habitantes. Buscan sostener actividad diaria, con las puertas abiertas y para ello ya proyectan algunas estrategias.

“Hoy hay personas que van, pero el club no está abierto. Entonces, es como que la gente espera que la invités, si no le decís ´vení´, no viene. Es contra lo que yo lucho. Porque hay gente que te mira como de lejos diciendo ´y ahora están estos´. Y yo no soy ´estos´. Yo siempre fui, porque viví la época en que el club estaba para todo el mundo y sigo pensando que es para todo el mundo. Nosotros estamos de paso” le dijo Walter Tolosa a Central de Noticias en una entrevista.

El sábado 13 de abril se renovó la comisión directiva. Walter Sosa sigue como presidente. Había iniciado en agosto de 2022 y ahora renovó por un año con su segundo mandato. El vicepresidente es Raúl Sagardía, la secretaria es Estela Mancini, la prosecretaria es Mariela Schawb, el tesorero es Rubén Silva y la protesorera es Beatriz Siris. Los vocales titulares son Diego Mancini, Arturo De Los Santos, Mariel Arouxet, Cintia Garay, Julio Ligori y Sergio Erneta. Los vocales suplentes: Celia Donofrio, Rocío Pellejero, Cristian López, Carlos Cariman, Fernando Laborde y Micaela Yampa. Revisores de Cuentas: Ricardo Venzi y Agustín Echeberet.

Con la primera presidencia de Walter y aquella comisión directiva iniciaron “una campaña de socios. En ese momento había 36 socios que pagaban la cuota. Nosotros hicimos un poco de hincapié en eso y llegamos a tener 211 socios. La cuota anual cobramos vale 3.000 pesos. Es irrisorio, pero no podemos pretender mucho más porque no damos ningún servicio, es solamente con una colaboración”. Hoy tienen 237 socios que aportan. “El club es para ellos, es para la comunidad, el club se fundó con ese fin” definió.

Pero igualmente esos fondos sirven, reconoce el presidente. Hace dos años “empezamos a comprar las cosas para el techo” con esos recursos. Y a eso suman los fondos que obtienen a partir de la organización de eventos y del alquiler del salón.

La novedad de la nueva comisión que se conformó este mes es que la mayoría de los integrantes son habitantes de la localidad. Es uno de los puntales para volver a tener un club con las puertas abiertas todos los días.

Las obras y los recursos

En agosto de 2022, cuando Walter inició su primer mandato al frente del Club Santa Luisa, encontraron las instalaciones “en malas condiciones por haber estado dos años cerrado” por la pandemia. “Había humedad y un tornado había desarmado un poco el techo. Lo encontramos medio pobre” contó.

La flamante comisión se dio a la tarea de renovar la sede “por etapas”. El club tiene un salón de 32 metros por 19, donde se ubica la cantina; la cocina –“nosotros le llamamos la peña”- de 16 metros por 6; y la cancha de bochas y gimnasio, de 32 metros por 11 metros.

“Nos pusimos a trabajar en lo que primero que encontramos más roto, fue el cielorraso del salón que lo había volado el viento y el parabólico que en la parte de afuera también se había desarmado un poco. Después, a emprolijar el salón y la peña” resumió Walter los primeros trabajos realizados. Con esas mejoras se festejaron los 99 años, “reunimos más de 470 personas, nos fue bien económicamente”.

Con esos fondos encararon más obras: el cielorraso de la cocina era el objetivo. Hasta es momento, el techo de la cocina del club era el mismo de cuando se había construido en 1969. Pero 53 años después estaba deteriorado y algunos materiales ya no estaban permitidos. “Hicimos un cielorraso PVC. Gastamos alrededor de 600 mil pesos y fue con la primera caja que hicimos. Después en la misma cocina cambiamos las mesadas que estaban rotas y la hicimos más larga”.

A eso siguieron más eventos organizados y co-organizados desde el Club mediante los que recaudaron más fondos para seguir con las mejoras. Una prueba de riendas y una doma. “Compramos material para la cocina, platos, vasos, sillas. Cuando llegamos a fin de año fuimos proyectando lo que queríamos hacer para los 100 años, queríamos algo diferente a lo que se hace tradicionalmente, demandó un montón de tiempo y horas de trabajo. Entre las cosas que nos propusimos hacer fue la revista de los 100 años que se encargaron Dolly Maier y Marta Frascaroli. Tengo que agradecerles eternamente por todo lo que hicieron” recordó el presidente.

En preparación para el 23 de abril de 2023, pintaron la sede, “todo, adentro y afuera. Trabajamos un montón de tiempo en eso porque vamos de a poco y somos pocos”.

Además de la fiesta aniversario, tuvieron un baile organizado por el Jardín 925, un baile con “Los Moros” y una peña folklórica. Los eventos tuvieron altísima asistencia, excepto el último porque llovió, hubo tormenta y se cortó la luz. Con esos fondos “arreglamos el techo de la cancha de bochas que estaba también todo roto. Hicimos un trabajo afuera porque se llovía todo por la chapa agujereada. Tenía un costo importante, habíamos hecho los contactos pero no podíamos llegar a hacerlo. Después de la fiesta de los 100 años logramos juntar el dinero: ahí invertimos 1.600.000 pesos en cambiar las chapas e hicimos un cielorraso de poliuretano expandido” detalló el presidente para valorar que “tenemos 99% solucionado el problema, quedó recontra lindo y tiene una durabilidad de 100 años”.

Otra inversión importante fueron las sillas. “Compramos 100 sillas de plástico, gastamos casi 800 mil pesos. Hoy no tenemos que salir a buscar una silla. Ahora estamos terminando de hacer los caballetes, que también teníamos que ir siempre a El Luchador a buscar 20 caballetes cada vez que hacemos un evento. Los estoy terminando en mi casa”. Es que Walter Tolosa no sólo proyecta y organiza los trabajos, sino que a muchos los ejecuta él mismo junto a otros dos directivos que también trabajan.

El piso del salón, el próximo gran objetivo

Ya en la gestión de este año, la intención de la comisión es terminar el piso del salón. Es que en 1982 ese edificio se amplió, “12 metros para adelante y dos metros para el costado. Entonces quedó la parte nueva del club sin piso. Tiene un contrapiso” explicó. A través de contactos con la empresa Losa, en diciembre del año pasado lograron recibir una donación de pisos y otra parte la compraron.

“Entonces hoy a lo que apuntamos es a poder ponerlo. Nos encontramos con unos números que es imposible” indicó Walter. Es que no sólo es la colocación, necesitan además la nivelación para que el piso antiguo y el nuevo queden a la misma altura: requieren 3,5 millones de pesos. Para poder hacer ese trabajo han buscado asesoramiento en distintas empresas, pero necesitan los fondos.

La expectativa está puesta en la fiesta del sábado 27 de abril. Esperan con ello poder terminar de reunir los fondos para la nivelación del piso para después avanzar con la colocación. “Estamos enfocados en la fiesta para poder juntar esa plata que nos falta y de alguna manera seguir con la campaña de socios, que es muy relativo lo que nos aporta pero en un aporte, en fin. Nosotros hoy tenemos 237 socios que nos pagan la cuota” subrayó el presidente.

Un club en Santa Luisa “es súper importante, ha sido toda la vida importante”