“Hay una historia que es nuestra y de la cual tenemos que hacernos cargo”

Este jueves, el antropólogo Leandro Lora presentó el Informe de la Verdad y la Justicia ante un gran marco de público. En diálogo con Central de Noticias reflexionó sobre esta fecha y sostuvo que “la insistencia en esta temática es imprescindible”.

Danisa Jaime // @_jdanisa

Agustín Dal Poggetto // @agustindalpo

Del staff de Central de Noticias 

El Informe de la Verdad y la Justicia se presentó este jueves en el Centro Cultural San José ante un gran marco de público.

Su compilador, el antropólogo Leandro Lora, recolectó diversos testimonios de personas de Olavarría que fueron, en su momento, secuestradas y detenidas en la última dictadura militar y que lograron ser una pieza fundamental de los testimonios judiciales en los últimos tiempos.

Desde la Comisión por la Memoria de Olavarría, hace unos años, se proyectó compilar estas historias y vivencias para finalmente recuperarlas en un Informe.

Leandro Lora contó que “de esta manera, se propone este trabajo como continuidad del Informe de la Memoria, que fue un trabajo que se realizó allá por el año 2000 y se presentó en el año 2001 y que estuvo encabezado por Mario Méndez”.

“En ese momento, lo que pretendía el Informe de la Memoria era poder recuperar las historias de aquellas personas que fueron asesinadas, que permanecen aún hoy desaparecidas, y poner un poco en contexto cuál había sido la historia de Olavarría durante la última dictadura cívico-militar”.

En este 24 de marzo, Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia, el antropólogo reflexionó sobre la importancia de militar la causa.

“Es parte de nuestra historia, sobre todo es parte de nuestra historia como olavarrienses. La importancia es hacer memoria. Hay que poder hacer hincapié en recuperar cuál es nuestra propia historia, cuáles han sido sus recorridos y esta es una parte cruel que tiene Olavarría” afirmó.

Asimismo, agregó que “la dictadura ha sido un hecho trágico y a la vez trascendente de la historia argentina, a la cual Olavarría no escapó. Entonces, su cuota de historia está latente de ser contada y está demandando un sacrificio inmenso de parte de quienes sufrieron la dictadura”.

“Ese sacrificio es contar a diario lo que pasó, responder entrevistas, ir al ex centro clandestino de detención Monte Pelloni, hablar con las escuelas todos los años, con las universidades y con las facultades” dijo Lora.  

Repetir una y mil veces: Nunca Más

El antropólogo sostuvo que “el Nunca Más, que se propone en clave nacional, tiene un apartado local donde los y las olavarrienses deben también formar parte de ese Nunca Más a escala local porque les pasó a nuestros vecinos, a nuestras vecinas”.

“Es importante sobre todo reconocer que le pasó a ciudadanos y ciudadanas de carne y hueso, con sus pasiones, con sus emociones, con sus sentimientos y que no fue un hecho ajeno” remarcó.  

“Hay una historia que es nuestra y de la cual tenemos que hacernos cargo. Hay un montón de testimonios a los cuales darle voz para conocer esa historia. Es parte de fortalecer nuestra identidad local, haciéndonos cargo de la historia por más trágica que sea”.

Insistir en la temática: Memoria, Verdad y Justicia

Luego de la denuncia conocida por parte de la agrupación H.I.J.O.S. la cual demostró la violencia hacia una militante de la agrupación por parte de dos hombres que la amenazaron de muerte, el antropólogo expresó la importancia de insistir y de hacer memoria.

“La insistencia en esta temática es imprescindible, es necesaria justamente  porque esto se viene planteando para que no ocurra Nunca Más, y lamentablemente vuelve a ocurrir con este tipo de actitudes, de expresiones” contó.

En tanto, agregó que “resulta imprescindible sostener las banderas, sostenerlas con la tenacidad con la que lo han sostenido y lo vienen sosteniendo las referencias que tiene esta temática, que son las madres, las abuelas y los hijos. No hay que dejar pasar ese tipo de discursos que terminan avalando la violencia, el odio, el revanchismo”.

A modo de reflexión, Lora dijo que “hay que ponerle un freno, pero la única forma es con una contundente expresión social: Si nuestra sociedad  no hace carne, no identifica, no reconoce la existencia de esta agresión verbal, simbólica, constante, que existe, que está en crecimiento, y que requiere de una reflexión social que traspase generaciones, que actualice la información, que ponga en contexto lo que ha sucedido y lo que puede volver a suceder, bueno, resulta infinitamente más difícil”.

Por eso, se debe “insistir con recuperar la historia, desde el respeto, con inteligencia, haciendo uso de los recursos de la Justicia, de la Ciencia, de la Educación, que están puestos al servicio de la constitución”.

Por último, Lora afirmó: “Uno tiene los mejores deseos de que las cosas reviertan esta tendencia violenta y agresiva que existe. Es difícil, pero justamente se puede lograr desde la insistencia en este tipo de trabajos, en este tipo de marchas y  desde un sector importante de la sociedad que intenta transitar estos más de 40 años de democracia y lo que viene, con paz y con la unidad de un pueblo” cerró el antropólogo.