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Cuando la desidia es tan grande como el no saber

El arquitecto José Luis Arguiñena emitió una nota de opinión tras las fuertes lluvias que generaron anegamientos, halagó al secretario de Obras Públicas Orfel Fariña y criticó duramente a Hilario Galli, ex funcionario y actual concejal.


Nota de opinión | José Luis Arguiñena – Arquitecto (Mat. CAPBA 16704)

Todo el mundo sabe que peronista no soy ni lo seré jamás. Ahora tengo que reconocer que al fin alguien (Secretario de Obras Publicas de Olavarría) dice lo que vengo sosteniendo hace muchos años.

El ejemplo fácil para que lo entienda todo el mundo es: si construyo una casa de 100 m² donde viven tres personas y tengo un solo caño de desagüe, después no se puede tener una casa de 200 m² donde viven 6 personas y sigo teniendo el mismo caño de desagüe. Es lógico que por lo menos tenga dos caños más.

Esto mismo pasa en la ciudad. Si los caños de la ciudad fueron colocados cuando la ciudad tenía 20.000 hab. y pocas cuadras de desarrollo, no podemos pretender que los mismos sirvan para una ciudad de 130.000 hab. y con un desarrollo no planificado.

Dicho esto, quiero felicitar públicamente al Ing. Orfel Fariña por sus palabras

“Orfel Fariña: Aboga por un cambio de enfoque frente a anegamientos

Fariña resaltó la naturaleza multicausal de la situación, atribuyendo los anegamientos a diversos factores como la inusual cantidad de lluvia, el crecimiento urbano y la capacidad limitada de los sistemas de desagüe. Subrayó la importancia de considerar cada sector de la ciudad y sus particularidades para implementar medidas adecuadas.

En relación con los desagües, Fariña destacó que los grandes conductos son relativamente pocos y sujetos a intervención, pero la red de desagüe en su conjunto presenta desafíos significativos debido a su sección pequeña.

Fariña enfatizó la necesidad de adaptar estrategias y fortalecer la infraestructura para enfrentar los anegamientos, reconociendo la complejidad y la multicausalidad del problema”.

Ahora voy a aclarar algo sobre la desidia y el no saber. Como le dije alguna vez al ex intendente José Eseverri y sus concejales de entonces, cuando estábamos viendo una posible Ordenanza de rivera (arroyo); la rivera es de sendos lados y el arroyo es todo lo que pasa por la ciudad o partido. 

Dicho esto, quiero refutar las palabras del actual concejal Hilario Galli (ex representante del ejecutivo municipal.

Hilario Galli: LA MENTIRA COMO BANDERA

“A lo largo de los 8 años de gestión de Ezequiel Galli se ha mantenido una política de gestión hidráulica concreta y activa.

Con obras mayores como el encauzamiento del arroyo Tapalqué hasta limpieza de canales y sumideros, trabajos constantes que permitieron que las calles no se abnegaran como vimos estos últimos meses. Siempre hay que prevenir”.

Esto apareció hace unos días, en la red social X del actual concejal, incluidas las fotos. Parece que no tiene muchas fotos de hidráulica, ¿porque será?

Quiero decirle a la comunidad que esto es mentira. Yo, personalmente cuando fui concejal durante el periodo 2015-2019, discutí e hice ver que no se estaban haciendo bien las cosas en hidráulica. De hecho, me canse de decir que el arroyo no era solamente de Estudiantes a la ruta nacional 226, que también la parte hidráulica del arroyo es todo lo que pasa por el Partido más todos sus canales afluentes (chicos y grandes). Si no se hacía la limpieza periódica de todo este conjunto a la corta tendríamos problemas. Ejemplo: si a un caño lo limpiamos en el centro de su desarrollo y no en la punta o en el final se tapará. Por cosas como esta de no callarme lo que estaba mal es que duré 4 años nada más (obvio porque no solamente “discutía” con la oposición).

Hecho todo este racconto histórico, quiero decir lo siguiente y lo que explicaré no es por los anegamientos que existieron en estos días por los temporales de lluvia que azotaron a nuestra ciudad (lo vengo diciendo hace muchos años y el que me conoce en lo profesional sabe que es así). En Olavarría debería hacerse con urgencia por lo menos una cosa fundamental, un estudio urbano por especialistas de todo el partido (no solo de la ciudad) y ¿por qué digo esto? toda ciudad cuando ronda los 100.000 hab. debe tener un estudio de, por ejemplo, cómo ha crecido y cómo debe seguir creciendo la ciudad. Esto implica un montón de cosas, entre ellos la infraestructura de la ciudad (caños pluviales, cañerías de cloacas, agua, gas, sistemas de electricidad, muy dañados estos últimos también en las tormentas pasadas, cableados públicos en general, etc.) y muchas otras cosas que hacen al buen desarrollo de una ciudad que no tienen que ver con este tema que nos atañe ahora.

A mi modesto entender, esto debería ser una “cuestión de Estado” y no tendría que cambiar según cambie el gobierno de turno. El desarrollo de infraestructura en la ciudad está colapsando desde hace años, en varios lados de la ciudad. Las cañerías y sumideros no dan abasto porque las personas tiramos mugre en la calle y esto va a las bocas de tormenta y estas a su vez están diseñada y calculadas, al igual que los caños para una ciudad de 30.000 hab, no de 130.000 hab.

Creo firmemente en defender y decir cuando las cosas se hacen bien y también cuando se hacen mal. A mí no me importa en esto el color político. Entiendo y soy consciente que todo lo que es infraestructura tiene un costo elevadísimo. Ahora, si se hace teniendo en cuenta el pasar de los gobiernos (continuidad) ese costo no se haría tan pesado (a esto me refiero con Cuestión de Estado) y no es cuestión de regalar a los ciudadanos porque antes no se regalaba, se pagaba entre todos para poder volver a hacer otra obra y más con los costos y la realidad argentina de los últimos 20 años por lo menos.

“Las cosas son más baratas si se hacen bien de movida, si se hacen mal son más caras porque hay que romper y volver a hacer”, esto se aplica a cualquier cosa en la vida, pero más a la construcción. El ejemplo que las cosas no salen más caras cuando se hacen bien que tenemos los olavarrienses es la política de hidráulica que se tuvo como ciudad hasta el 2015, de hecho, recuerdo una charla que tuvimos junto al Ingeniero Guenzatti con personas de la ciudad de Tapalqué en la Sociedad Rural de dicha ciudad, donde fuimos a exponer los trabajos que se hicieron en nuestra localidad.

La ciudad no es de una fuerza política o de otra. Podrá gobernar un tiempo más largo o más corto alguien, pero la ciudad es para todos y de todos y las cosas hay que hacerlas para ahora pero también para que duren.