Cooperativa de Limpieza “La Voluntad”: “Si tenemos apoyo de la gente vamos para adelante”

Una charla derivó en una idea, un proyecto y el acompañamiento del MTE. Cuatro mujeres solteras, con hijos, buscan estabilidad con una propuesta que pretende expandirse “ante la gran demanda” de otras mujeres.

“Qué importantes son las redes de contención feministas…” indicó, en un momento de la charla, Nuria Pola, integrante del MTE. Es que de una ronda de mujeres en el barrial surgió una idea, que englobó a decenas de mujeres en una misma situación, que derivó en un proyecto, que se tradujo en la Cooperativa de Limpieza “La Voluntad” con cuatro mujeres que buscan afianzar un proyecto y seguir sumando integrantes. ¿El objetivo? Ganarse el pan trabajando, con dignidad y derechos.

En diálogo con Central de Noticias en su redacción, Camila, Cintia y Matilde (faltó la cuarta integrante, Soledad, justamente porque estaba trabajando) contaron los pormenores de una propuesta que comenzó a dar frutos, pero que todavía tiene un largo camino por recorrer. Lograr una base de trabajo para las cuatro y permitir el ingreso de más trabajadoras, con una demanda altísima de mujeres que crían solas a sus hijos.

Camila, una de las trabajadores, destacó que la idea surgió de una ronda de mujeres en el barrial ubicado en Nicolás Avellaneda, más precisamente de “Vientos de Libertad”. “Soy madre soltera hace 8 años y la única que sostengo mi casa, con mis dos hijos como todas las compañeras que somos, estamos en la misma situación”.

Allí le preguntaron qué le gustaría hacer y “surgió la idea de limpiar porque de otros rubros hay montón y en cantidad, todos hacen todo y es algo que no está movido, no se ve casi, que chicas que quieran trabajar de limpieza. Armamos el proyecto y el MTE nos está dando el apoyo para que crezca: crecer yo y las compañeras, somos muchas” insistió.

Cintia también es del barrio Nicolás Avellaneda y rápidamente se pusieron manos a la obra. Al proyecto le sumaron la ropa de trabajo, se sumaron dos mujeres más, y hoy la cooperativa está integrada por cuatro personas. “La idea es hacer esto más grande y que todas las chicas -porque hay muchas en el barrio- también consigan su trabajo”.

Uno de los objetivos, además, es poder vencer los prejuicios y permitir una verdadera reinserción social para aquellas que cumplieron alguna pena y estuvieron bajo arresto: “ya salieron y la idea es que le demos la chance a ellas que no consiguen. Reintegrarse a la sociedad, empezar de cero cuesta mucho. Que no le apunten con el dedo”.

“Hay muchas personas que quieren cambiar, la voluntad de cada una de querer salir adelante…por eso la cooperativa se llama La Voluntad”.

Camila indicó que ni bien se conoció la cooperativa, el trabajo comenzó a aparecer: “tengo algo fijo una o dos veces a la semana, ella también y queremos que todas las compañeras también aunque sea 2 o 3 veces por la semana tengan algo fijo. En esta casa, en este salón”. Por ahora, “salieron dos trabajos, y los que salgan serán tomados por las otras compañeras hasta que todas tengamos un laburito cada una”.

Con respecto al servicio que ofrecen, la idea es expandirlo a cualquier tipo de sector, no sólo una casa o un salón. “Queremos abarcar todo, oficina, instituciones. Mientras tengamos laburo, lo básico…” señalaron.

Como reflexión, Camila cree en la propuesta y “tengo mucha fe de que nos va a ir bien. Si tenemos apoyo de la gente vamos para adelante”.

Inventarse el trabajo

La situación se repite sin distinción de barrio. Decenas de mujeres que mantienen solas a sus hijos con trabajos inestables, que no son permanentes y que generan incertidumbre.

Matilde, por ejemplo, contó que “me hago cargo de mi hijo sola y me cuesta un montón. Soy nueva en el MTE y me dieron la oportunidad. Con las mujeres unidas no hay forma de que no se puedan dar las cosas”.

Justamente, esta chance generó expectativas y adhesión en personas que quieren sumarse: “ahora somos cuatro pero queremos que nos conozcan para así podemos ampliar la cooperativa, y ser muchas más mujeres que puedan salir de nuestra salida económica”.

“Cuando nos vieron que largamos la cooperativa se acercaron muchas chicas en la misma situación que nosotras, no hay trabajo, estamos solas con hijos. En este momento no podemos incorporar más gente porque no tenemos el trabajo, queremos que se agrande el trabajo y ahí sumar chicas” proyectaron.

Para finalizar, señalaron que también cuentan con sus elementos de trabajo correspondientes y que desde el MTE “nos garantizaron las herramientas y dos conjuntos de ropa de trabajo”. La futura venta de rifas, la inversión en más indumentaria y otros elementos son los planes de “La Voluntad” una cooperativa que presenta una propuesta para cuatro mujeres, pero que en un futuro cercano serán muchas más.