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Descuentos de la obra social: “que la universidad se haga cargo del aporte es muy difícil”

El rector de la UNICEN Marcelo Aba se expresó sobre la denuncia realizada por un grupo de docentes por las retenciones que sufren por parte de OSPUNCPBA. Respecto a la renuncia de profesionales por esta situación afirmó que “no todos los casos obedecen al problema de la obra social”.


En el marco de la Expo Unicen que se desarrolla en Olavarría, el rector Marcelo Aba se refirió a la situación que atraviesa un grupo de docentes universitarios luego de que la obra social OSPUNCPBA realizara descuentos que en algunos casos significa un recorte del 36% del salario bruto.

 

En primer lugar, aclaró que “la obra social es una entidad privada, externa a la universidad, más allá de que quienes la integramos seamos parte de la universidad. Toma sus decisiones y el rectorado y la universidad en su conjunto no participa de esas decisiones”.

 

Es en ese contexto que “ha decidido que los aportes eran demasiado bajos para sostener las prestaciones que se estaban brindando y ha tomado una decisión de elevar el aporte mínimo”.

 

Aseguró que la universidad cumple con la ley 24.741 “que es la que rige las obras sociales universitarias y que establece que el aporte de la patronal es el 6 por ciento de la remuneración”.

 

Y agregó: “que la universidad se haga cargo del aporte es muy difícil porque no lo recibe y deberíamos desafectar partidas que hoy están destinadas al resto de la vida universitaria para poder cubrir ese aspecto”.

 

Por otra parte, pidió “diferenciar las situaciones y aportar claridad”. Reconoció que “hay una problemática que afecta a un elevado número de personas que son quienes tienen las bajas dedicaciones. Esta es la razón por la cual las obras sociales universitarias tienen una ley especial. Es raro encontrar en otros espacios laborales una carga tan alta de gente que tienen un horario reducido”.

 

“Hoy lo que se está tratando es de adecuar la problemática de los costos de salud. Hay que tener en cuenta que el aporte mínimo es de 6 mil pesos” y reiteró: “6 mil pesos para una obra social que sostiene a una familia también es difícil de sobrellevar”.

 

 

Respecto a la situación reflejada por este medio de al menos 5 renuncias de docentes universitarios, señaló que no quería “avanzar sobre el tema” porque la vicedecana a cargo de la facultad se iba a expresar. Sin embargo, sostuvo que “no todos los casos obedecen al problema de la obra social, algunos son problemas particulares que han coincidido en el momento y en otros casos seguramente lo de la obra social ha sido el detonante final pero no el origen de la renuncia”.

 

Además, resaltó que en muchos de los casos de los docentes afectados “no es el único ingreso y realmente sostener una obra social con la solidaridad de quienes realizan el aporte cuando quizás esa persona tiene otro un salario superior al de quien es solidario, tampoco es justo”.

 

Por último, explicó que “la obra social ha ofrecido alternativas” en referencia a un Plan Médico Obligatorio que “está dentro de la ley” pero los docentes acotan que no ofrece las mismas prestaciones. “Además está la libertad de elegir otra obra social”, concluyó el rector.

 

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