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Casitas lectoras, un proyecto para democratizar la lectura

Es impulsado por la biblioteca Del otro lado del árbol. Consiste en compartir libros en una casita de madera, con el compromiso de devolverlos o dejar otro en su lugar.


Hablar de la biblioteca Del otro lado del árbol es –entre otras muchas cosas- hablar de propuestas novedosas y cargadas de amorosidad. En esta oportunidad, buscan replicar una idea que surgió en Chajarí, Entre Ríos de la mano de las hermanas Patricia y Cecilia Capovilla.

 

La propuesta consiste en la instalación de casitas de madera en distintos puntos de la ciudad, para que los vecinos y vecinas puedan compartir libros. Tal como explican desde la biblio: se puede llevar un libro de los que eligen para liberar o dejar libros donados para compartir.

 

Lo importante es “que los cuides y acompañes su viaje volviendo a soltarlos cuando ya no los uses”.

 

En diálogo con Central de Noticias Andrea Fernández, referente de la biblioteca, destacó que “recibimos mucho material donado que por ahí tenemos repetido o no es apropiado para nuestro espacio. No sabíamos para dónde redireccionar este material, vimos este proyecto y pedimos autorización para replicarlo acá”.

 

 

Por el momento existen dos casitas “hechas con mucho amor”. Una en el parque Helios Eseverri y otra en el Barrio Pueblo Nuevo (Cerrito 2345). “Estamos construyendo más casitas”, contó Andrea.

 

Para que el proyecto se sostenga es importante la apropiación que la gente pueda hacer de la iniciativa. Cada casita cuenta con un guardián o guardiana que se hace cargo de cuidar el material. Además, se coloca un cartel con la explicación del proyecto.

 

 

La idea motora busca según Andrea “garantizar el acceso a la lectura”. Es una forma de compartir con otras personas esos libros que no se están usando. Casitas lectoras, apuesta a la solidaridad y el compromiso. A pensar en los otros y cuidar de manera comunitaria la circulación de la palabra.

 

Por último, Andrea recordó que para que el proyecto llegue a más personas, si se encuentran con una casita pueden retirar un libro y etiquetar a la biblioteca en redes sociales así la iniciativa gana en visibilidad.