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Aclaran cómo funciona la guardia veterinaria en Olavarría

El círculo de veterinarios realizó algunas aclaraciones tras “escraches y agresiones”. Actualmente, son nueve los veterinarios que integran la guardia.


Tras denunciar diversos “escraches” e incluso “agresiones psicofísicas” desde la Guardia del Círculo de Veterinarios de Olavarría realizaron una serie de aclaraciones sobre cómo funciona el servicio “para el mejor entendimiento del mismo”.

 

Explicaron que este servicio nació tiempo atrás “como una forma de responder a la demanda de los clientes de los veterinarios que componen la guardia (actualmente 9 colegas), siendo el horario de atención de 24hs. los 365 días del año. El mismo se fue masificando a los tutores de mascotas en general, aunque no fuera este el fin primario”.

 

Con el paso del tiempo, ante “sucesivos hechos de violencia psicofísica sufridos por los colegas en horas de la madrugada y ante la imposibilidad de contar con un aparato de seguridad acorde para desempeñar nuestro trabajo con normalidad” el horario fue modificado y así funciona actualmente: “de 8:00 a 24:00 horas los 365 días del año”.

 

Dentro de este servicio, en tanto, hay un solo veterinario trabajando “con lo cual si estamos ocupados, en ocasiones, no podemos responder llamados y solo podemos atender de a una consulta por vez”. Un punto a tener en cuenta es que es una Guardia privada, y por ello “el servicio tiene un valor, más allá de realizar nuestra labor con pasión, la misma es nuestro medio de vida”.

 

El servicio no realiza domicilios “ya que, al ser para atención de urgencias, no podemos trasladar todo lo necesario para una correcta atención del paciente” y también es una guardia pasiva, es decir, “el veterinario actuante no se encuentra en la veterinaria, sino que se acuerda la consulta previo llamado del tutor al número de guardia (Cel: 15305491)”.

 

Si bien desde la Guardia del Colegio de Veterinarias entienden “las situaciones que pudieran presentarse y causaren la angustia de los tutores y nos solidarizamos con los mismos cuando estas no pudieran ser atendidas en el tiempo que el tutor considerase apropiado” aun así y a los fines de “poder mantener el funcionamiento de este servicio, solicitamos que se comprenda que realizamos nuestra labor con total vocación y todas las herramientas que podemos poner a disposición de nuestros pacientes, e instamos a que cada tutor procure tener un veterinario de cabecera que pudiera asistirlo o al menos contener la situación, en caso de que el colega de guardia estuviera ocupado con una urgencia previa, hasta que el servicio esté disponible”.