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El paso firme de la campaña se topó con baldosas flojas

La ola de inauguraciones, el acto del barrio Uocra con cruces y polémicas, y dos reclamos al Municipio desde Colonia Nievas y desde Sierras Bayas. La UCR proyecta interbloques. Los 11 mil votos que distancian al FdT del Senado provincial. 


Extracto del newsletter Volver a las Fuentes, donde se puede acceder y suscribir acáPor Alexis Grierson y Josefina Bargas.

 

Obras inauguradas, discusión repetida

 

Cerró el plazo para inaugurar obras públicas el miércoles en el contexto de la campaña, pero en la previa vivimos una verdadera ola de inauguraciones. Hasta tuvimos que llevar una agenda para seguirla.

 

El mayor protagonista fue Ezequiel Galli, que se presentó en el barrio CECO con las veredas nuevas del sector 1 (una obra que terminó hace bastante y que financió la Nación en el acuerdo que firmó Gabriel Katopodis cuando estuvo en Olavarría el año pasado), en la pavimentación de un tramo de avenida Pueyrredón y en la repavimentación de avenida Ituzaingó.

 

 

En cada caso Galli enfatizó su mensaje de “cerrar el ciclo” entre la demanda de obras del electorado y la respuesta de la gestión. Desde la oposición, la crítica fue repetida: las obras fueron financiadas por Nación y Provincia, pero las inauguró el intendente. Es una discusión que tuvimos en ediciones pasadas, y ya pasado el plazo para inaugurar obras podemos hacer un primer balance: fue el día de la marmota de la campaña. Sí, la financiación de buena parte de la obra pública inaugurada fue por Nación y Provincia y sí, la decisión y el acercamiento de proyectos para esa financiación fue realizada por el Municipio. ¿Qué es más importante? Ustedes podrán develarlo por sí mismos, lectores y lectoras.

 

De todos modos, el acto que generó más controversia estuvo en el barrio Uocra, con la histórica -aunque no fue tan mencionada- finalización del barrio en la entrega de las últimas 16 casas. Confusión, discusiones, invitaciones, y un acto que inevitablemente salió mal.

 

El culebrón del Uocra

 

La Provincia, con el flamante administrador del Instituto de la Vivienda Agustín Simone organizó el acto de entrega de las últimas 16 casas del barrio Uocra, poniéndole fin a una lucha histórica de los vecinos por terminar el barrio que tantas idas y vueltas generó, varias gestiones provinciales y municipales y vaivenes de casas que estaban terminadas pero no eran entregadas.

 

 

Primer detalle: desde el Municipio, horas antes, se encargaron de dejar en claro que no estaban invitados al acto“Se cansaron de inaugurar obras provinciales y nacionales y tampoco nos invitaron, pero no por eso fuimos a mostrarnos o querer empañar un acto” respondieron desde la otra vereda. Horas después, se confirmó que Cristina Nieto, del Instituto de la Vivienda de los Trabajadores (un organismo de la Uocra), se había comunicado con el Intendente Galli y le manifestó la intención personal de que “tenía que estar” en el acto.

 

Y con invitación, hacia allí fueron Galli y compañía. Hasta Gastón Acosta, integrante del círculo de confianza del Intendente estuvo allí. La dirigencia de los principales espacios en competencia en la campaña local había coincidido en un acto. De fondo, las camperas de “Gerardo Martínez conducción” también se hicieron notar.

 

 

Hasta el inicio del acto y más allá de este detalle, todo fue cordialidad y respeto. Se vieron saludos, abrazos, mucha camaradería y lo que parecía un foco de conflicto se terminó transformando en un clima mucho más ameno para el acto. Pero no quedó ahí.

 

En los preparativos, mientras tanto, se veía una logística habitual en este tipo de entregas: se llamó a los beneficiarios para anunciarse como presentes, se les explicó la logística del acto y todo marchaba sobre rieles. Hasta que…

 

 

Cristina Nieto quiso tomar la palabra en reiteradas oportunidades y sólo lo pudo hacer a viva voz, dado que no tenía micrófono. Ya había habido, previamente, un chispazo porque no fue nombrada como autoridad presente en el acto. “Se esperaba que adelante estén Aguilera, Wesner y Simone” indicaron desde la organización. Pero también estaba Liliana Schwindt. En fin, todo fue un caos que comenzó a complicarse…

 

Cristina Nieto quiso tomar la palabra, pero como su participación a todas luces no iba a ser posible, intentó que Liliana Schwindt sea la oradora “femenina” del acto. Esto derivó en un muy tenso cruce con Maximiliano Wesner que tuvo su pico en la ya famosa frase. “Son unos machirulos, Cristina tenía razón”.

 

A la incomodidad, le siguió una fuerte confusión en la entrega de carpetas, en un corte en el acto, en una reanudación, en incertidumbre que terminó empañando quizás lo más emotivo e importante de este evento: la profunda emoción de las 16 familias que tras muchísimos años, podían acceder a su casa“Mi esposa falleció hace tres años, me hubiera encantado disfrutar de nuestra casa con ella acá” dijo un hombre visiblemente emocionado luego del acto, con la llave en mano. Más de una década y media de espera por una casa, las vidas de los adjudicatarios cambiaron decenas de veces, pero la dirigencia eligió competir en su campaña electoral y opacó lo más importante.

 

 

Las interpretaciones de lo sucedido aparecieron por doquier: que el Frente de Todos se “pegó un tiro en el pie”; que “estaba todo armado por el Municipio”; que “Nieto sólo quería generar problemas”; que “así el Municipio ni tiene que hacer campaña” e incluso se cuestionaba la obvia participación de Maximiliano Wesner en el acto, que claramente tenía una presencia electoral. Lo concreto es que se terminó corriendo el eje un tipo de acto donde la prioridad, siempre, es el vecino, donde las gestiones y la política se ven materializados en la profunda emoción de las familias que recibieron sus casas. Habrá que tomar nota.

 

El culebrón de la antena

 

¡Qué linda vista de la Iglesia de Colonia Nievas! Se rompió mi vista de la Iglesia de Colonia Nievas. Es que Telecom comenzó a instalar una importante antena de telefonía celular en la localidad del Partido… en el medio del pueblo. Con un agregado: la parroquia fue declarada patrimonio histórico cultural en 2017 y está prohibido por ordenanza emplazar este tipo de estructura tan cerca del templo en cuestión.

 

Tal es así, que los vecinos rápidamente se mostraron en contra de la decisión dada no sólo la cuestión de salud, sino que había una “afectación visual” a una Colonia Nievas que se encuentra en ascenso turístico. Créannos: la antena afea y mucho la vista.

 

 

Los vecinos empezaron a hablar entre ellos, empezaron a mostrar su enojo… hasta que lo hicieron público con un cartel en el ingreso a la localidad. “Los vecinos de Nievas no autorizamos la antena ¡apoyanos!” rezaba dicho cartel.

 

Lo público fue ganando terreno y al cartel se le sumó una manifestación justo en el predio donde se encuentran instalando la antena. Además del Enacom, esa antena debe ser autorizada por la Provincia y el Municipio. Y si se busca potenciar el turismo, ¿por qué se autorizó tamaña obra en el medio de la localidad? No dejemos pasar la mención: hubo una manifestación en Colonia Nievas y es un hecho histórico.

 

Algunos vecinos “célebres” (¿candidatos?) manifestaron su enojo en consultas periodísticas informales pero en otros ámbitos habrían dado conformidad a la colocación de la antena. También se acusó a un vecino quien cedió las tierras para avanzar en ese sentido: según otras versiones, “no estaba en el acuerdo” que sea exactamente en ese lugar. En fin…cuestiones vecinales.

 

 

Lo concreto es que el tema fue creciendo en enojo y lograron ser recibidos en el Municipio para resolver el tema. Casi una decena de funcionarios y concejales recibieron a tres vecinos de la localidad. Para sorpresa de algunos, el Municipio dijo que había rechazado la colocación de la antena, pero la habilitó “porque la empresa presentó la autorización escrita de varios vecinos para llevarla adelante”. Ellos aseguraron que estos avales se lograron con información “falsa y errónea”. El Municipio les dijo que apoyará su reclamo por la reubicación del equipo.

 

Pues bien, ya emplazada una parte de la antena (se estima que se colocaron más de 30 de los 45 metros que tiene) buscarán conseguir otro lugar para que no perjudique la imagen de una localidad que lleva muchos años trabajando para potenciar el turismo rural. Ahora, ¿lo lograrán? Los trabajos parecen bastante… definitivos y no debe ser nada barato generar los cambios necesarios. Sumado a que las autorizaciones fueron otorgadas. Se viene una disputa larga y compleja.

 

 

Y no fue la única a la que el Ejecutivo que enfrentar. Sin Ezequiel Galli, el Municipio organizó el acto protocolar de aniversario de Sierras Bayas. En representación del jefe comunal estuvo Hilario Galli, secretario de Gobierno…y lo estaban esperando. Los vecinos autoconvocados del Barrio ETA (que aún aguardan avances de las tierras para poder avanzar en la construcción de las viviendas del barrio) primero hicieron pública una carta al Intendente Galli con duros términos por no atender lo que comienza a transformarse en un reclamo de casi cinco años, y horas después se hicieron presentes en el acto para pedir explicaciones acerca de la “traba” que el Municipio dice que es de Provincia, Provincia dice que es de Municipio, e historia conocida ya por todos.

 

En lo concreto, y en un diálogo previo a la actividad, el Municipio se comprometió a profundizar en el reclamo para destrabar el expediente y que siga su paso para, de esta forma, habilitar a la construcción, en esas tierras, de 60 viviendas para los vecinos, dando respuesta a una aguda problemática que tiene la localidad de hace mucho tiempo, incluso más aguda que la que tiene Olavarría (que ya es compleja de por sí).

 

La unidad del interbloque de Juntos

 

El fin de semana estuvo Danya Tavela en Olavarría: presencia con dirigentes radicales y del Pro, reunión con el secretario de Gobierno Hilario Galli y una frase que se reafirma cada vez que sucede un acto de estas características: mostrar la unidad de Juntos tras la interna.

 

A veces parece demasiado repetitivo, pero es una forma de evitar una “fuga” de votos de aquellos que acompañaron al ala radical hacia otros espacios que no sean la lista integrada del oficialismo local. De todos modos, en al menos las últimas cuatro actividades en conjunto se recalcó el mismo mensaje: “Estamos juntos”.

 

 

“Dime de qué presumes y te diré de qué careces” dice el dicho. Durante la semana se empezaron a ver signos que muestran la unidad por un lado, pero manteniendo las diferencias por el otro.

 

La UCR adelantó que en todos los ámbitos legislativos bonaerenses plantearán la creación de interbloques de Juntos. Es decir, trabajar todos bajo un mismo nombre pero con autonomía de funcionamiento. En Olavarría incluso hay una experiencia que es la del Frente de Todos, con varios espacios internos funcionando dentro del gran bloque.

 

De esta forma, habría independencia (mostrando las diferencias) pero trabajando todos de forma orgánica. Así, probablemente, se evitarían fugas del espacio oficial del Intendente como aconteció en todas las elecciones del jefe comunal hasta la fecha: Fernanda Araneo y Gabriela Delía se fueron en 2016; Martín Lastape en 2019 y Celeste Arouxet un año después. ¿La particularidad? Todos son radicales.

 

Puertas adentro y ante la consulta de este newsletter, de todas maneras, hubo balances positivos y alentadores de cara a lo que viene. Algunos dirigentes radicales admitieron, al principio, “desconfianza” por lo que podía acontecer en la campaña luego de la interna pero con el correr de los días eso se fue transformando: “no nos podemos quejar, estamos trabajando muy bien y con posibilidades de tener nuestra independencia para seguir las recorridas de Belén Vergel y Sebastián Matrella” indicaron.

 

 

Proyectando para la Legislatura

 

¿Qué tan cerca está una banca en el Senado para el Frente de Todos? Con esa pregunta un lector de VAF, atento a los números, corrigió nuestra observación de la edición anterior en que señalamos que “faltan 3.000 votos” para que el oficialismo provincial logre sumar un senador desde la Séptima.

 

En realidad la gran incógnita es cómo será la participación en las Legislativas, que en las Primarias alcanzó 67%. Y la segunda duda es cómo se comportarán los electores que efectivamente elijan una fuerza, es decir, cuántos serán votos afirmativos, ya que de ellos se deducen los porcentajes de cada fuerza en competencia, y con eso la distribución de bancas. El piso es de 33% para alcanzar una banca, recordemos.

 

 

Con una participación estimada de 75% como se proyecta, significa que se sumarían a votar unos 21.100 ciudadanos más en toda la Séptima y se superarían los 203.000 electores. Con una proyección lineal, los votos válidos llegarían casi a 200.000 y los afirmativos a 181.000.

 

Cómo ahora la base del cálculo es mayor (basada en el total de votos afirmativos), para que el Frente de Todos pueda llegar al 33,33% debería sacar 60.348 votos: 11.474 votos más que en las PASO. No es una cifra imposible, pero tampoco es tan fácil.

 

Claro, lo que más abunda es la incertidumbre.

Un extracto

 

Estos temas, y otros más de la actualidad del ámbito político local, se publicaron en la edición de este domingo del newsletter Volver a las Fuentes –en esta edición, “Florecieron los conflictos
y los “peros” en la unidad”
 – que escriben semanalmente Alexis Grierson y Josefina Bargas.

 

La publicación es gratuita, sale todos los domingos a la mañana. La edición completa acá y la suscripción está abierta aquí mediante una dirección de correo electrónico.