“Los asalariados no registrados y los cuentapropistas experimentaron el mayor golpe”
Luis Campos, coordinador del Observatorio del Derecho Social de la CTA – Autónoma, habló en Radio Universidad 90.1 sobre el incremento de la desocupación en el segundo trimestre del año. Detalló el impacto que esta situación tiene principalmente sobre los trabajadores no registrados y los cuentapropistas.
Este martes, Luis Campos, coordinador del Observatorio del Derecho Social de la CTA-Autónoma, analizó los datos informados días atrás por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) respecto a la tasa de desocupación y el impacto que tuvo la cuarentena en la tasa de actividad.
En diálogo con César Edery para Radio Universidad 90.1, detalló en primer lugar que los datos que se dieron a conocer dan cuenta de una tasa de desocupación en torno al 13,1%, una tasa de actividad que cayó por debajo del 40% y una tasa de empleo que se derrumbó hasta el 33%.
“Son datos de un trimestre muy complicado en materia laboral. La emergencia económica, el parate económico se reflejó fundamentalmente en la caída de la tasa de actividad y la tasa de empleo”, indicó Campos.
La tasa de actividad (proporción de la población que tiene trabajo o busca tenerlo activamente) cayó casi 10 puntos respecto del año pasado, y de un modo similar cayó la tasa de empleo (proporción entre la población ocupada y la población total).
Es interesante el análisis que realizó Campos respecto a la categorización metodológica que realiza el organismo para llevar adelante la medición. “El Indec da cuenta de aproximadamente 1,4 millones de desocupados en el segundo trimestre de 2020, y es más o menos la misma cantidad de desocupados que había en el primer trimestre del año. Pero lo que cayó muchísimo es la cantidad de ocupados que el propio organismo no categoriza como desocupados sino como inactivos”.
Explicó que “esto tiene que ver con una cuestión metodológica que, para considerar desocupada a una persona, el Indec requiere que esta persona no haya realizado tareas laborales pero que al mismo tiempo esté buscando activamente un puesto de trabajo”. Es decir, que en este contexto sanitario y con medidas restrictivas hacia la movilidad “muchas personas que perdieron su puesto de trabajo no pudieron desarrollar la tarea que antes realizaban con lo cual estadísticamente para el Indec figuran como inactivas”.
Respecto a los sectores más perjudicados, Luis Campos señaló a los trabajadores no registrados y a los asalariados por cuenta propia que “cayeron muchísimo con relación al trimestre anterior”.
Y agregó que “los asalariados registrados son los que dentro de todo resistieron más exitosamente la crisis económica en contraposición con los asalariados no registrados y los cuentapropistas que son los que experimentaron el mayor golpe”.
Por otra parte, aseguró que “en cierta medida el gobierno nacional tomó muchas decisiones para proteger el empleo registrado como la prohibición de despidos, la habilitación de mecanismos de suspensiones, la implementación del programa ATP, todas medidas que apuntaron a tratar de que el deterioro en el mercado formal de fuerza de trabajo fuese el menor posible”.
Sin embargo, para el mercado informal de fuerza de trabajo, las herramientas de protección fueron menores. “En este caso solo hubo mecanismos de transferencias de ingresos fundamentalmente el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) que permitió en cierta medida contener y garantizar algún tipo de ingresos en esos hogares”, afirmó.
Por último, indicó que si bien “algunas actividades comenzaron a recuperarse” aún “estamos lejos de haber finalizado la crisis económica y la gran crisis sanitaria”.