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Juntos tira del hilo de la polarización

La campaña mostró una conflictividad en ascenso durante la semana. La suerte y el debate que viene. Objetivo al 22 de octubre: llegar al 35% para ganar.


 

Volver a las Fuentes // Alexis Grierson y Josefina Bargas

 

Galli, al ataque

 

“Quieren convertir a la Municipalidad en un kiosco, en un maxikiosco. ¿Y sabés quién lo quiere atender? La Cámpora”. Así comenzó un video que el lunes lanzó Ezequiel Galli en sus redes. Allí el intendente contrapone la idea de “dar vueltos” con la de “cultura del trabajo y el esfuerzo” para atacar a su principal contrincante y ganador de las PASO en la ciudad.

 

Si bien la intención de pegar a Maximiliano Wesner con su pertenencia a la agrupación La Cámpora es un elemento que el oficialismo viene utilizando como ataque desde los inicios de la campaña de este año, esta fue la primera vez en que en la voz del candidato a la re re se hace una acusación tan frontal hacia su rival en las elecciones. Y no solo por su pertenencia partidaria, sino de qué harían en caso de llegar al Palacio San Martín.

 

Y tuvo, por primera vez, una respuesta directa por parte de Unión por la Patria: fue con un comunicado en el que se señaló que “nuestro Frente político resultó ser el espacio más votado” para ubicar ahí el punto de quiebre en la campaña: “el oficialismo local ha emprendido una violencia verbal y una metodología de campaña agresiva” se sostuvo para definir que Galli “se convirtió en el principal vocero de la descalificación y las acusaciones. Se intenta generar un clima hostil creyendo que de esa manera se puede revertir lo que ya eligieron la mayoría de los olavarrienses”.

 

 

Y a lo último retomaron el planteo expuesto por Wesner la semana pasada sobre folletos “apócrifos” de campaña que fueron dejados en distintos sectores. “Llamativamente las palabras que utiliza Ezequiel Galli son las mismas que circularon en el material apócrifo que se distribuyó la semana anterior por distintos barrios de la ciudad”. Fue un paso más allá del que había dado Wesner en la conferencia, donde se limitó a señalar sus cuestionamientos por el “uso de su imagen” en los folletos, pero no había dejado una responsabilidad directa señalada.

 

Hilario Galli fue uno de los voceros de la “respuesta” a la acusación: dijo que no hay “nada malo” en señalar a Wesner como integrante de La Cámpora, e incluso vaticinó que violento “es no decir de dónde viene uno para presentar su candidatura”.

 

Sin embargo, el eje estaba puesto en el mote de “maxikiosco” y el “dar vueltos” como premisa de gestión, o lo que podríamos decir más burdamente como corrupción: “se plantea como que es algo violento pretender que lo que representa este espacio a nivel provincial y nacional no llegue Olavarría, porque cuando uno ve de lo que son capaces en cada uno de los lugares que ocuparon en Nación y en Provincia y uno piensa qué puede llegar a pasar si entran a la ciudad. Y la verdad que no tengo muchos ejemplos positivos, nos tienen acostumbrados a este tipo de actos de corrupción. Uno no quiere eso para la ciudad” se defendió el secretario de Gobierno y candidato a concejal.

 

 

Aquí hay un primer punto a señalar: la conflictividad que se vio en la campaña electoral local en los últimos siete días es un pico en una línea que viene creciendo. No nació la semana pasada, y evidentemente, no parece que hubiera finalizado. Lo que primó hasta el sábado, desde Juntos por el Cambio, fue la comunicación de ataque más que la propositiva. Cuestión: quedan aún dos semanas antes de las elecciones y ¿qué nos depararán?

 

En lo que hace puntualmente al escenario de campaña, en este caso Galli se ubicó hablando directamente con Wesner y logró correr al candidato de Unión por la Patria del eje propositivo que ha mantenido casi en la totalidad de la campaña.

 

El caso del debate que no se hizo

 

La página pasó muy rápido al martes. En la edición anterior de VAF habíamos adelantado que se organizaba un debate de candidatos para estudiantes secundarios en el Club Pueblo Nuevo. Iba a realizarse el miércoles, pero no pudo ser.

 

Un comunicado firmado en conjunto entre Ahora Olavarría y Juntos por el Cambio irrumpió: “decidieron, de manera conjunta, no participar de la Jornada de Ciudadanía en Ejercicio”. Y explicaron que originalmente, la organización de la actividad correspondía al Colegio Nuevas Lenguas, pero luego, “se vio alterada y modificada por la intromisión de la Jefatura Regional de Educación”.

 

 

En la visión de ambos sectores, las autoridades educativas tomaron la organización, impidieron el protagonismo y la libre participación de los estudiantes, incluso dictaron las preguntas. “No se va a permitir el avasallamiento ni el adoctrinamiento a los estudiantes por parte del gobierno de Axel Kicillof” dijeron.

 

El lunes se había realizado una reunión organizativa de esa jornada de exposición de candidatos. Al cierre del encuentro, los representantes de Juntos y de Ahora Olavarría, Hilario Galli y Guillermo Lascano, respectivamente, se reunieron: “terminamos de caer en cuenta de todas las cosas que estaban pasando y que a ninguno de los dos nos parecía adecuado” dijo el secretario de Gobierno municipal. Conclusión: con el aval de sus respectivos candidatos, redactaron y emitieron el comunicado.

 

Horas después, las Jefaturas Regional y Distrital de Educación informaron que el debate quedaba suspendido porque “de no participar dos de los cuatro representantes creemos que no cumple el requisito fundamental de tener acceso a todas las propuestas y garantizar la pluralidad de voces”. Allí se afirmó que en las reuniones organizativas ningún sector había manifestado quejas, con lo que dejaron entrever su sorpresa ante el comunicado. “Estamos sorprendidos y consternados”, en palabras de Marta Casanella.

 

 

Buscó rebatir algunos puntos del comunicado de las agrupaciones que rechazaron asistir al debate, especialmente lo referente al origen de la organización y al rol de los estudiantes. Se sumó a estos cruces de comunicados institucionales y entrevistas, un comunicado del Colegio Nuevas Lenguas donde se aclaró que “desde las Jefaturas Regionales de Educación se nos dio la posibilidad de ser parte de una propuesta que integre a alumnos y alumnas de todas las escuelas secundarias del distrito y que luego por cuestiones ajenas a la organización, de común acuerdo debimos suspender”. “Hoy estudiantes de nuestra escuela iban a estar presentes” dijeron el miércoles.

 

El caso terminó ahí en el ámbito de la comunicación pública porque empezó otro conflicto disparado por Juntos que también tuvo al ámbito educativo en el centro. No obstante, vale señalar que lo sucedido significó una oportunidad perdida para los estudiantes secundarios de acceder de primera mano al discurso de los candidatos.

 

“En contra del adoctrinamiento”

 

La Mesa Educativa de Juntos por el Cambio tuvo una semana agitada y la concejal Maite Salerno fue una de las protagonistas. Hubo reunión con el ex ministro provincial Gabriel Sánchez Zinny quien había estado en la ciudad. “Estamos trabajando para cambiar el sistema educativo que las gestiones nacional y provincial destrozaron” dijo Salerno quien pronunció el objetivo de “asegurar que los chicos puedan acceder a la educación y enseñarles a pensar en lugar de adoctrinarlos”.

 

¿Otra vez la palabra “adoctrinar” en un comunicado de Juntos? Y todavía faltaba. “La Mesa Educativa de Juntos debatió sobre adoctrinamiento y persecución docente” fue el título de un comunicado emitido el viernes.

 

 

Allí expusieron un encuentro donde estuvieron familias, docentes y no docentes, con detalle en referencias a la Escuela Secundaria N° 17 de Sierra Chica sobre “la mala experiencia vivida con el director de la institución”. Resultó muy llamativa la personalización del planteo para presentar la falta de corte de pasto en la escuela y la acusación a una supuesta militancia en Unión por la Patria del director en cuestión como base del conflicto con los padres y estudiantes.

 

En voz de docentes no identificados se planteó “estamos perseguidos, amenazados”. En tanto, en voz de estudiantes se afirmó desde la Mesa Educativa que “los docentes son rehenes de presiones sindicales y partidarias, pero los alumnos de todos los niveles también estamos siendo rehenes de un sistema que no nos enseña a pensar”.

 

En En Línea Noticias, José Mogavero, docente y director de la Secundaria N° 17, dio otra versión del problema del corte de pasto y apuntó a un conflicto con la Delegación Municipal que abarca también a las otras escuelas de la localidad. “Tuvimos que recurrir a recursos propios, tanto la escuela secundaria 17 como las Primarias 2 y 13, para poder hacer el mantenimiento del pasto” aseguró. Además, informó que desde la Cooperadora se buscará dialogar con el delegado por lo expuesto en el comunicado partidario.

 

 

De ninguna manera eso fue todo. En redes, Maite Salerno, Emilio Vitale y hasta Ezequiel Galli salieron a responderle. Ya no aludieron a la militancia partidaria sino que fueron a la responsabilidad de “la Provincia” en la tarea de corte de pasto en las escuelas. El objetivo que persiguen -Galli lo explicitó- es exponer la gestión de Kicillof. Sin embargo, en esa línea de interpretación, la responsabilidad recae en el Consejo Escolar aunque hacia ese organismo no hicieron referencia. ¿Vos también te acordaste de los primeros meses de 2020 cuando había un grupo de funcionarios municipales y militantes que iba a cortar el pasto a las escuelas?

 

Por otro lado, también hay que dejar planteado que al igual que con el video de campaña que contamos al principio, en el escenario que se plantea en este caso se advierte el mismo mecanismo: mostrar en diálogo y en oposición a Juntos y a Unión por la Patria. En línea con la estrategia principal de campaña de Patricia Bullrich, la intención de Galli es la polarización para tratar de correr (a nivel discursivo al menos) a Celeste Arouxet.

 

El caso del debate que sí se hace

 

Con todos estos antecedentes -un contexto bastante complejo- el martes sí se realizará (al menos hasta ahora) el debate de candidatos a Intendente de Olavarría organizado por la Facultad de Ingeniería. Está prácticamente todo listo: temáticas, sorteo de exposiciones, preguntas, solo falta el contenido.

 

En un contexto de campaña bastante áspero y con mucho en juego, habrá que ver cómo se encarará el debate por parte de los cuatro espacios políticos: si nos basamos en lo que hemos visto en las comunicaciones de las fuerzas, el tono sería de contrapuntos en ascenso. Pero, como todos sabemos, no a todos les servirá ese tono si hay una gran recepción de lo que suceda en la casa de altos estudios.

 

Con transmisión en vivo de prácticamente todos los medios locales, el sorteo planteó un orden que, en la previa, tuvo algunos beneficiados y otros perjudicados. Vale la aclaración, por si hay un mal pensado: el orden de las exposiciones y las preguntas fue por sorteo. Es decir, primó la suerte.

 

 

El primero que se escuchará en la presentación será Maximiliano Wesner. Y será el último: tendrá su minuto de cierre luego de que el resto de los candidatos lo haga.

 

El intendente Galli, por ejemplo, tuvo -en un análisis rápido- mala suerte en las preguntas: en el eje 1 de política económica y recursos materiales le preguntará Celeste Arouxet, quien es muy crítica de ese aspecto de la gestión. Incluso, fue la que recalcó -en varias oportunidades- que el déficit superaría los 1.100 millones de pesos (y se sigue acrecentando); en el eje 2 de política y recursos sociales le preguntará Agustín Mestralet, un dirigente que ha encabezado innumerables movilizaciones al Palacio San Martín por… reclamos en ayudas sociales. En el tercer eje, políticas de recursos comunitarios, recibirá una pregunta de Maximiliano Wesner pero aquí tuvo un “beneficio”, dado que le preguntará después de que el candidato de Unión por la Patria haga su consulta.

 

Después de los dos debates nacionales -el segundo se hace hoy- habrá que ver cuánto incide en la postura de los candidatos y, obviamente, cómo tomarán cada uno los valores de sus propios referentes nacionales y provinciales al momento de generar empatía con el potencial votante que puede ver -y tomar- el debate como algo para declinar su voto en uno u otro candidato.

 

Y ya que entramos en ese tema, nunca es tarde para hablar de…

 

Un poco de ingeniería electoral

 

Obviamente es imposible prever lo que puede pasar en una elección. Incluso con encuestas podemos tener una tendencia pero nada concreto. Hoy trabajemos un poco la mente y pensemos posibles escenarios en torno a los arrastres y la experiencia de las PASO, de la que todos tomaron y trataron de aprovechar para mejorar en octubre.

 

Hace algunas horas el propio Javier Milei admitió que “le faltan algunos puntos” para llegar al anhelado 40% que lo pondría en zona de victoria en primera vuelta, siempre y cuando Sergio Massa no quede a menos de 10% de los votos. Lo concreto es que estos dos datos permiten empezar a pensar qué puede pasar con los arrastres hacia abajo, y qué se puede aportar desde abajo hacia arriba.

 

 

Por un lado, un fenómeno muy particular fueron los 6.000 votos de diferencia entre Javier Milei y Celeste Arouxet en la votación de Olavarría, saliendo favorecido el león. Un corte hasta inusual por la cantidad de votos puso en alerta al campamento libertario local y la campaña y rápidamente se transformó en slogan para el 22 de octubre: “Sin cortes, la violeta de punta a punta” en referencia a su boleta como ya hemos contado.

 

Aún así, si pensamos en un corte menor pero muy alto, Celeste Arouxet tendría grandes posibilidades de crecer -y mucho- en la elección. Dependerá obviamente de cómo trabaje su propuesta de boleta y qué pase con el corte a favor de Maximiliano Wesner o Ezequiel Galli, que sin Larreta como referencia (y más allá del apoyo a Bullrich, ganadora de la interna) juega un poco más suelto.

 

Si nos trasladamos al Intendente Galli, la situación es más compleja: luego de ser la segunda fuerza y quedar tercero en las candidaturas individuales, debe atacar dos flancos a la vez. Uno más sencillo por situación ideológica, y uno más complicado por resultado local. El más sencillo es tratar de que la mayor cantidad de votos posibles de los derrotados en su interna (que ganó su contrincante nacional, encima) termine a su favor. Pero, además, debe potenciar su propia figura y resaltar los valores de la gestión local en lo que se evidenció como un “voto castigo” al trabajo realizado por la comuna en los últimos años.

 

 

Tratar de aliarse con Bullrich y Grindetti pareciera ser más sencillo por pertenencia ideológica, aún cuando sus rivales en la interna lo acompañaron poco -y más bien nada- durante la campaña. Tanto Marcelo Spina como Dalton Jáuregui se mostraron de forma aislada con el jefe comunal y decidieron no ponerle el cuerpo a la carrera electoral de Galli. No así Andrea Coronel del vecinalismo y Juan Zyla del espacio de Monzó, a quienes por el contrario se los pudo ver en cada recorrida que realizaron los sábados desde Juntos por el Cambio.

 

En lo que refiere a la campaña local, depende obviamente de un equipo de trabajo pero la figura que debe ponerse adelante como protagonista excluyente es la de Ezequiel Galli. Y algo así se vio (bueno, en realidad no se ve, se sabe) en las últimas semanas: varias reuniones diarias, recorridas por diferentes instituciones y un trabajo silencioso que dista y mucho de la campaña de las PASO y que puede tener resultados el 22 de octubre

 

Es cierto que se trabajó más en limar a Wesner que en presentar propuestas propias (de lo que por ahora no se vio mucho aunque faltan dos semanas para la elección) pero el desafío mayor estará en potenciar la figura propia local con una Bullrich que viene de días complejos y, pareciera, que desdibujada por un Milei que crece sin parar y un Massa que intenta sostenerse en tiempos turbulentos. Quizás el arrastre del frente propio no sea un gran aliado. Un corte de Milei quizás podría complementar.

 

 

Y Maximiliano Wesner atraviesa otro momento distinto: con un peso mayor de su candidatura (y las de la interna de UxP en Olavarría) con respecto a la interna nacional y Axel Kicillof en Provincia, el trabajo es 100% local. Se hizo notar con el trabajo previo a las PASO que le permitió ganar la elección no solo a nivel individual, sino también como frente político.

 

Con un punto a no olvidar. ¿Se acuerdan que al inicio les hablábamos del corte desfavorecedor de Celeste Arouxet? Bueno, fue bastante beneficioso a Maximiliano Wesner. ¿Qué se hace cuando hay un corte marcado de Javier Milei que en el otro extremo elige a Wesner? ¿Se lo deja ser? Pareciera que esa es la premisa.

 

¿Es militar en contra de Massa? Si y no. En momentos electorales se deben tomar decisiones, y hacer pesar una campaña más local por sobre lo nacional hace que no se contemple el gasto de energía en el voto al candidato nacional de Unión por la Patria. Y un detalle: a la vista, pareciera que Sergio Tomás no vendrá en campaña de aquí al 22. Al menos hasta el sábado por la noche esa era la información. Todo puede cambiar.

 

 

También tiene el desafío de absorber los votos de Eduardo Rodríguez y Hernán Parra (los de este último quizás los más complicados) pero las manifestaciones continuas de los dos en recorridas con el ganador de la PASO hace que el trabajo sea distinto.

 

Justamente, la pelea estará en tratar que el crecimiento nacional de Javier Milei no se lleve de arrastre a Arouxet.

 

¿Cuál es el cálculo de Volver a las Fuentes? Si se sostiene la elección de tercios, el que llega a 35% gana. No hay medias tintas. Y está claro que los tres, de una forma u otra, tienen chances de superar el 30% de los votos.

 

Es una ingeniería electoral con un final muy abierto, que dependerá de detalles. Desde el corte a los tonos de la campaña. Y que dependerá además del recuento de hasta el último voto.

 

Un extracto

 

Esta publicación es parte de la edición de este domingo del newsletter Volver a las Fuentes que escriben Alexis Grierson y Josefina Bargas. La edición completa está disponible aquí y tiene un sistema de suscripción económica y aportes únicos al que se puede acceder aquí.